Los Juegos Olímpicos son la justa deportiva más importante a nivel mundial, cada cuatro años las mejores atletas de todos los países se enfrentan para demostrar sus capacidades y así definir quién es la mejor. Como es común en la historia de la humanidad, las mujeres no tuvieron presencia en esta celebración deportiva desde el comienzo, sin embargo fueron ganando territorio gracias a su determinación, pasión y disciplina.
Desde los inicios hasta ahora, los Juegos Olímpicos han crecido en número de deportes, atletas y países. México ha participado en 22 de ellos y acumula 69 medallas (13 de oro, 24 de plata y 32 más de bronce), de las cuales 17 fueron ganadas por mujeres.
Las atletas mexicanas comenzaron su participación dos ciclos olímpicos después que los varones y lo hicieron tan solo con dos deportistas, es decir, la presencia de las mujeres empezó siendo muy desproporcionada a la de sus compañeros, por lo que las oportunidades de ganar medalla eran pocas, además también el número de competencias olímpicas en la rama femenil eran menos.
Medallero con campeonas mexicanas
El despunte de las mexicanas arrancó en los Juegos Olímpicos de Sidney 2000 a pesar de seguir siendo menos las participantes y el número de competencias femeniles, las atletas empezaron a ganar más medallas, siendo así que de las 27 obtenidas por la delegación mexicana desde entonces, 15 ya fueron conseguidas por ellas.
Estos logros se deben a que en las diferentes disciplinas aumentaron el número de competencias femeniles, lo que significa que a más competencias, más atletas y mayor posibilidades de medallas.
Es importante aclarar que el número de competencias no es igual al número de atletas, ya que varias deportistas del mismo país pueden participar en una sola competencia, o a su vez una sola atleta puede estar en más de una contienda.
En México, las atletas han ido ganando clasificaciones para estar presentes en más competencias.
Las que llegan a las Olimpiadas
Que una atleta pueda ir a los Juegos Olímpicos depende de diversos factores, ya que existen instituciones “deportivas” que son las que definen sedes, disciplinas olímpicas, número de participantes, formas de calificación y por supuesto toda la cuestión económica que rodea esta celebración deportiva.
El organismo más poderoso e importante de todos es El COI (Comité Olímpico Internacional) que es el encargado de decidir en dónde se harán los Juegos, quiénes son los patrocinadores, por cuáles medios se transmitirán, los costos de las transmisiones, horarios de las competencias, o decisiones extraordinarias como la del 2020 de posponer los Juegos Tokio 2020 debido al COVID-19 y está integrado principalmente por hombres blancos con mucho poder económico, que explica el por qué desde un inicio las mujeres no han tenido la misma participación que los varones, pero ellas han logrado ir conquistando este terreno deportivo hasta hacerlos más equitativos para Tokio 2021.
El COI tiene un Comité Nacional en cada país, en México es el Comité Olímpico Mexicano (COM) este se encarga de hacer la conexión entre el COI, atletas y organismos deportivos mexicanos para la participación en los Juegos Olímpicos, es decir, hace todas las gestiones necesarias para llevar a la delegación mexicana.
Todos los deportes cuentan con una Federación Internacional, lo que significa que cada deporte como atletismo, natación, ciclismo, etc, tienen a su propia federación, que es la organización que se encarga de tomar todas las decisiones sobre récords, clasificaciones, número de competencias y son respaldadas por el COI.
Al igual que el COI, las Federaciones Internacionales tienen Federaciones Nacionales en cada país. En México son las que definen cuáles serán las atletas que irán a los juegos y cómo será su clasificación, además de ser las responsables de la distribución del dinero que proviene del Estado.
Quien reparte el presupuesto a las federaciones es La Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE), que es una institución del gobierno que además de fomentar el deporte en el país, también se dedica a crear y becar a las atletas de alto rendimiento, o sea las que irán a los Juegos Olímpicos.
Es decir, la ruta de la atleta, es un complejo camino en el que se encuentran diversos obstáculos a sortear, como es la falta de incentivos para que las niñas hagan deporte, que en la mayoría de los puestos de toma de decisiones están representados por hombres, que aún en pleno siglo XXI siga la creencia que el deporte es un terreno masculino y que existan menos competencias para mujeres.
A pesar de esto, las deportistas han logrado ponerse en lo más alto del podio y así han inspirado a que más niñas quieran practicar la disciplina que más les apasiona. ¿Quién no quiso ser la próxima Ana Guevara, la nueva Nancy Contreras o María del Rosario Espinoza? incluso ahora muchas pequeñas desean ser como Alexa Moreno.
La brecha de género aún existe, sin embargo cada vez se va haciendo más estrecha y es por el trabajo de las mujeres que han luchado por demostrar que el deporte es para todas y todos.