CUERPO Y POTENCIA

La mezcla explosiva de las campeonas
Texto e ilustraciones: Areli Rema

El culto al cuerpo en los Juegos Olímpicos es la base esencial de su historia, ver la potencia que tienen las atletas y observar sus cuerpos en acción es mirar todo el trabajo de entrenamiento en los músculos, la elasticidad, la rapidez que pueden alcanzar con cada extremidad, y los sentidos que se agudizan, son el resultado del proceso de trabajo que se hace evidente en la competición. Las atletas dan muestra de que la perfección está en lo que cada una se proponga, y en sentir la fuerza de sus cuerpos y su mente. 

Ellas van en contra de la idea persistente del cuerpo “perfecto” de las mujeres atletas, que impone la obligatoriedad de un cuerpo siempre delgado, joven y fuerte, aunque no demasiado porque sino ya es calificado como un cuerpo masculino. Los cuerpos de las atletas son diversos y en muchas ocasiones se adaptan a sus disciplinas y las expresiones de sus deportes. En estas radiografías hay una pequeña muestra de esa diversidad.


Guillermina Hernandez

Guillermina Hernández es mexicana e inició su carrera en el deporte a los 28 años. Ha practicado natación, atletismo y basquetbol, pero en la danza encontró la manera en la que quería expresar el movimiento junto con la música. Con una habilidad indiscutible en la silla de ruedas, “Guille”, como es más conocida, ganó el primer lugar en la categoría de principiantes en 2006, cuando participaba por primera vez en el Mundial de Para Danza Deportiva de Holanda.

Tras quedar con secuelas de polio cuando apenas era una bebé de 1
año de edad, Guille creció con un gusto y deseo por practicar deporte, aunque de manera profesional a la edad que inició su carrera no se considera una edad joven, ella ha demostrado que no es un impedimento para seguir con su pasión. El ritmo con el que cuenta en la pista va desde tango, vals inglés y hasta zumba, donde muestra su habilidad como bailarina.

La disciplina y el trabajo de entrenamiento son parte fundamental de
su vida, el proceso es diario y constante. Con los movimiento de su
cuerpo, Guille refleja ese rigor y a la vez el disfrute de su disciplina.
En 2017 fue seleccionada y compitió en el Mundial de Mallen, aunque las demás competidoras eran más jóvenes, la experiencia de Guille le otorgó un lugar en la categoría de single woman y en estilo libre, categoría que en ese año era la segunda vez que se competía.


Ellie Simmonds

La imagen del cuerpo de las atletas, y sobre todo en competencia, es muy expuesta, con notas sobre su desempeño se acompañan comentarios sobre la forma de su cuerpo, si es o no el “cuerpo perfecto” que “debería” tener una atleta. Esta constante opinión pública ha generado que sean duramente criticadas. A pesar de estos obstáculos las atletas siguen demostrando que lo que importa es el desempeño, y que el culto al cuerpo se da desde la potencia y sus capacidades, y no siguiendo un canon estético específico. 

Otra gran referente de atletas paralímpicas y de la rebeldía contra esa imagen es Ellie Simmonds, de origen británico, Ellie es nadadora de talla pequeña, y cuando tenía 13 años se colocó en el medallero en los Juegos Paralímpicos de Pekín en 2008, se convirtió en la atleta más joven de Gran Bretaña en ganar una medalla. El trabajo duro y la idea de seguir siendo ella misma ha caracterizado su carrera, y para 2009 logró 6 medallas de oro y una de plata en el Campeonato Mundial de Natación, en Brasil. 

Ellie nació con acondroplasia, conocida como enanismo, y es una gran referente del equipo británico. En 2011 en los Campeonatos Europeos de Natación del CPI (Comité Paralímpico Internacional), en Berlín, su desempeño logró dos medallas de oro, una de plata y otra de bronce, además de romper dos récords mundiales. A partir de sus logros, en 2012 apareció en los posters de los Juegos Paralímpicos, y una imagen gigante de Ellie se colocó en uno de los edificios que se encuentran frente al parque olímpico de Londres. En los Juegos Paralímpicos de Río 2016 Ellie siguió demostrando su potencia y rompió el récord mundial en los 200m individuales haciendo un recorrido de menos de 3 minutos.


Anita Wlodarczyk

El cuerpo se va forjando en el deporte, y en cada especialidad se trabajan de manera distinta los músculos, unos más que otros dependiendo de la singularidad de cada competencia. Si bien la fisonomía responde a la parte genética, y se suma también la disciplina y el trabajo, es importante reconocer las características y capacidades del propio cuerpo para aprovecharlas al máximo en el desempeño, por ello la diversidad en los cuerpos aunque compitan en un mismo deporte. 

Anita Wlodarczyk, de nacionalidad polaca, es una referente de gran potencia, especialista en lanzamiento de martillo, es la única mujer hasta ahora que ha superado el lanzamiento de los 80 metros, este récord mundial lo consiguió en los Juegos Olímpicos de Río 2016, con una marca de 82,29 metros. Además ha ganado los últimos 5 títulos y mundiales, consiguiendo los 15 mejores lanzamientos en la lista de la IAAF (Federación Internacional de Atletismo Amateur) de todos los tiempos. 

El lanzamiento de martillo es una especialidad del atletismo que consiste en hacer 3 giros en su propio eje antes de hacer el lanzamiento, el martillo tiene un peso de 4kg aproximadamente, y es necesaria una técnica específica para el deporte, que involucra una postura adecuada y el trabajo de piernas y brazos.  Anita es considerada la mejor lanzadora de martillo en la historia, ganando el Campeonato Mundial de Atletismo en 2009, 2013, 2015 y 2017.


Caterine Ibargüen

Caterine Ibargüen también es una representante de atletismo de gran potencia, de nacionalidad colombiana, practica en las categorías de salto alto y largo, pero se ha consagrado en la de triple salto. Aunque las rutinas y entrenamientos están dirigidos al cuerpo en general, Caterine, a diferencia de Anita, concentra mayor actividad en las piernas y eso se ve reflejado en su cuerpo, su alta estatura le ha favorecido para volar en la pista, aunque en sus inicios en el deporte esta cualidad la aprovechó para jugar voleibol,  la velocidad siempre fue un gusto constante. 

Su primera participación internacional fue a la edad de 15 años en el Campeonato Sudamericano de Atletismo en Bogotá, y en el 2004 asistió a sus primeros Juegos Olímpicos en Atenas, en estas competencias no pudo superar la primera ronda, y en 2006 en Moscú tampoco logró colocarse en el medallero. Pero no se dio por vencida y logró colocarse en el podio en los Mundiales de Atletismo de 2011, 2013, 2015 y 2017. Además de 2 medallas en los Juegos Olímpicos, de plata en 2012 y de oro en 2016. Y se ha consagrado como la primer atleta colombiana y suramericana en conseguir el máximo galardón de la IAAF.


Sevda Altinoluk

Dentro de las potencias que el cuerpo permite al practicar deporte también está el agudizar los sentidos, los deportes paralímpicos con atletas con debilidad visual son un ejemplo de ello, y una representante es Sevda Altinoluk, quien compite en el equipo turco de golbol. Este deporte es practicado por personas ciegas o con debilidad visual y se juega con antifaces opacos para igualar la nula visibilidad de cada deportista, además de un balón que contiene cascabeles dentro para que el sonido sea la guía, la competencia se trata en anotar el mayor número de goles al equipo contrario. 

Sevda comenzó a jugar a los 12 años de edad, y se ha consagrado como una de las mejores goleadoras. Este deporte le permite un gran movimiento del cuerpo, lanzar el balón con fuerza, agacharse y aventarse con el cuerpo estirado en diferentes direcciones, dependiendo del rastro de sonido que los cascabeles van dejando, para impedir que el equipo contrario haga una anotación a su portería.

En 2010 Sevda ganó la medalla de plata en el Campeonato Europeo celebrado en Turquía y en el 2012 en Italia consiguió la medalla de oro, lo que la colocó en ser la primera en la lista de goleadoras con un récord de 27 anotaciones. En 2016 en los Juegos Paralímpicos de Río, junto con su equipo obtuvo la medalla de oro, ella logró 36 puntos durante la competencia, y fue la primera medalla de oro paralímpica de Turquía en el golbol femenino. En 2018 logró, gracias a su lanzamiento agresivo, que Turquía llegara al Campeonato Mundial en Malmö, Suecia, y aunque el equipo ruso obtuvo la victoria, Sevda se volvió a posicionar como la máxima goleadora con 46 anotaciones.

Cada una de estas atletas nos muestran la diversidad de sus potencias, cuerpos en acción que dan cuenta que no existe un solo canon de figura, sino el deseo de llevar la mente y el cuerpo a la experiencia de la adrenalina, al disfrute, al gozo por estar en movimiento y no detenerse aunque a veces se presenten obstáculos. La satisfacción de hacer deporte se vive de manera diferente en cada una, pero el culto al cuerpo se mantiene desde apreciar cada fuerza.

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